TARTESSOS

 
                                                     

DISPUESTOS PARA LA MODIFICACIÓN

 

Hayy Sidi Sa'id ben  Ayïba al Andalusí

 

"El Conocimiento de las Siete Luces en la Tradición de los Sufies" - La Tradición Hermética en Atlándalus. Del Libro "Tras la Puerta Dorada"

 

"Todo cuanto existe se manifiesta por el movimiento, pues la ausencia de movimientos seria la no manifestación, el no ser. El movimiento implica la modificación, y la modificación implica la desaparición de una forma que se extingue y la aparición de otra forma nueva que nace". De las enseñanzas de Hermes-Thot a Tat.

 

Solo La Sustancia Esencial, causante de todas las formas estable, ella es Agera, La Realidad, y las formas transitorias que de ella dimanan son el Dunia, lo ilusorio.

 

"No todas las personas están llamadas a tener ni las mismas experiencias ni por los mismos cauces. Pero en cambio todo cuanto existe si que está llamado a confluir en un punto de singularidad final, al igual que en su momento surgió de Él".

 

Todo cuanto es creado lleva un proyecto existencial impreso, pero no todo llega a cumplir con ese proyecto, ya que de por medio existe el esfuerzo, donde muchos fracasan, que nos incita a escarbar en lo aparente para descubrir lo verdadero. Las personas ni siquiera llegan a intuir lo que se esconde tras el mundo apariencial, se han dejado atrapar por el enorme poder de la seducción del Dunia y cayeron en el juego de la inestabilidad, en cuya vorágine generan su propio dolor y , aun a veces , el de otros.

 

Si todas estas personas, que sin saberlo están perdidas, quisieran escuchar, les diría con Ibn Arabi: "Si no habéis aprendido a conocer a Dios ahora ¿como vais a conocerlo después? Claro que, estas personas, responderían que no les importa. Podrían decir aquello de: "Para cuatro días que vamos a vivir es mejor disfrutarlos sin pensar en complicaciones metafísicas que no son demostrables". Pero ... "Si el arrullo de tu sueño es el ruido de la cadena que arrastras ..¿así arriesgas el después?"

 

Todos los seres capaces de albergar la Conciencia Intelectiva están llamados, por imperio de la propia naturaleza, al desarrollo de la propia conciencia hasta alcanzar el mas alto grado posible de desarrollo, es decir, de Conocimiento.

 

El Conocimiento de si, la conciencia de ser, es la cualidad más alta que puede darse en el marco creacional. Este es un planteamiento tan obvio como que la demostración empírica de ello se encuentre en la naturaleza dinámica de la propia Conciencia, Es un hecho irrefutable.

 

El Objetivo fundamental de la Creación, por lo tanto, es el de servir como el medio por el que la Conciencia pueda desarrollarse hasta reconocer-Se como el Ser Único, y esto exige, de nuestra parte, un indeterminado esfuerzo que es irrenunciable. Excepto que se renuncie, sabiéndolo o sin saberlo, a la propia naturaleza, y nos conformemos con  ser un mamífero más o menos hábil. Aunque no deja de ser decepcionante que se nos haya investido de tal alta cualidad para que, afín de cuentas, no dejemos de ser otra cosa que animales, listillos, pero sin razón.

 

El Conocimiento se desarrolla en nosotros desde el corazón que ama, por medio de la reflexión que acaba en oración, y del esfuerzo al que nos invita la confrontación permanente entre lo aparente y lo real.

 

Nunca las "luces de la escena", las fútiles grandezas, o "el anzuelo de los misterios", condujeron a ningún buscador a puerto seguro. Sería estupendo que en vez de dedicar nuestro precioso tiempo a hablar de lo que nos gustaría hacer, o a soñar con ello, comenzáramos haciendo ¡ya! alguna pequeña cosa.

 

Hermes-Thot recomendaba a su discípulo Tat lo siguiente:

"Evita conversar con el ignorante satisfecho de si mismo, sería estéril. No permitas que la vanidad se apodere de ti por lo que sabes, recuerda el vacío de lo que no sabes. Busca a quienes te son semejantes, que serán pocos, y crece con ellos".

"Los que no ven lo falso, perciben lo Verdadero, si uno comprende, si uno ve lo que cada cosa es, comprende y percibe la Verdad. Pero si ve lo que no es, no puede comprender y nada sabrá de los Verdadero".

 

Y ¿Que es la Verdad Primera? Pregunto el discípulo: "El Uno sin dos, El que no está formado de materia y no se halla en ningún cuerpo. El que carece de forma y color, El que es inmutable y siempre permanece".

 

Por aquí solemos decir que "Tras la Puerta de lo aparente, se oculta el rostro del Existente", por eso quien conoce a Allah mueve las manos para otros y deja enfriar la lengua in importunarlos. Porque quien está en el Todo, lo tiene todo y nada necesita para sí mismo. De ahí que el correcto ejercicio del bien nos exija adentrarnos en la Sabiduría, pues sin esta no se posible alcanzar la más alta bondad. El Existente, la Bondad y la Sabiduría son tres formas diferentes de expresar una misma Verdad: Allah".

 

El Ruh de Allah que anima cada una de las partículas que nos conforman en este Universo, es por su naturaleza dinámica, permanentemente cambiante, Creador. De ahí que la curiosidad ubicada en la Conciencia sea ilimitada, pues necesita aprender para modificar y crear. Así pues la naturaleza humana es, en su génesis, inquieta, sujeta al aprendizaje y a la modificación que encabeza este articulo.

 

Desde esta perspectiva y haciéndonos dóciles a la Acción Creadora, el ser humano puede alcanzar la estabilidad emocional habiendo asumido lo inevitable de la modificación en todo cuanto existe.

El dolor tiene su origen en el mal que creamos los seres humanos, y este mal es consecuencia, en definitiva, de la ignorancia. Pero ya hemos comentado que el mal no es algo existente por sí mismo, sino como consecuencia del desequilibrio en los procesos de modificación. El cambio puede producir malestar, pero este malestar tiene su origen subjetivo en la falta de control sobre el ego, puesto que si el cambio es consustancial a todo lo existente, el ego despierto debería haberlo asumido como natural.

 

A veces suponemos que todo cuanto nos rodea debe de tener como punto de referencia nuestra capacidad de entendimiento y la utilidad directa que, a nuestro juicio, pudiera procurarnos. No solo no es así, sino que, además, este criterio también da origen a sentimientos de frustración y desasosiego, ¡las cosas no son como yo quiero! Diversas causas de origen educacional y patológico deterioran de forma estable y menoscaban transitoriamente los niveles de conciencia. Probablemente no exista persona alguna que, en ocasiones, no haya sentido en sí mismo los efectos dolorosos del ego descontrolado. Esto no es otra cosa que la oposición violenta a los imprevistos avatares de la vida. En muchas ocasiones, por causa de acontecimientos irreversibles, las personas dejan que el dolor las domine.

 

Solemos decir que cuando el problema tiene solución que esperas, no has de preocuparte a destiempo, y si el problema en cuestión no tiene solución posible ¿por qué desesperas?

 

Deja que la Creación te encuentre como el alfarero encuentra la arcilla, ¡ maleable !, y verás que por cada puerta que se te cierre en una dirección se te abrirá otra puerta en la dirección que no esperabas. Así serás dócil en las modificaciones y progresarás en pos del destino que te forjas, aún sin conocer. Pero es el que se te tiene reservado

 

Pero Allah sabe más (Allah subhana watallah)