TARTESSOS

 
                                                     

PRANAYAMA TÁNTRICO

 

  Escuela Tántrica Sivaíta

 

 

 

 

En los estados de conciencia tántricos (alterados, holotrópicos, holísticos y conscientes) podemos trascender los estrechos límites del ego corporal y aspirar a nuestra identidad plena. Ello es debido a que la respiración es un puente entre el consciente y el inconsciente. El trabajo con la respiración nos ayuda en este proceso porque induce el estado de conciencia tántrico y crea un contexto seguro que nos permite volver a conectarnos con nosotros mismos, con los demás, con el mundo natural y con el espíritu.

La palabra holotrópico deriva de una raíz griega, significa moverse hacia lo íntegro. Las plantas se mueven en dirección al sol con un movimiento heliotrópico. En la misma forma, durante una sesión holotrópica, el organismo humano está en un estado de conciencia que le permite moverse en dirección a su integración, volverse un todo completo, holístico y consciente, y sanar sus propios aspectos heridos o fragmentados.

Mientras se desarrolla el proceso que corresponde a este trabajo, van surgiendo muchas experiencias, pero proponerse experimentar el Pranayama Tántrico por sí misma no es el propósito de este trabajo. Los objetivos son plenitud, sanación y sabiduría. Las experiencias son los medios que permiten alcanzar estos objetivos. Cuando el cuerpo y la mente entran en un estado de conciencia tántrico a través del control de la respiración, la sabiduría interior aprovecha la oportunidad para avanzar en dirección a la sanación física, mental, emocional y espiritual, y también para realizar un cambio evolutivo. El Pranayama Tántrico opera según el siguiente principio:  
somos nuestros mejores sanadores.

El Pranayama Tántrico combina elementos como: control de la respiración, música, supervisión individual, arte, un período flexible de tiempo sin un momento de finalización determinado y una forma particular de trabajo focalizado en el desbloqueo de la energía. Todos estos elementos suponen un cuidadoso entrenamiento de los facilitadores que conducen las sesiones de las personas que respiran. Estas características del trabajo promueven la seguridad y la cura dentro de estados de conciencia no habituales.