El 1º de Marzo del 2000, el sitio web "The
New Scientist" presentó un reporte acerca
del descubrimiento de evidencia sobre la
presencia de homínidos en el sitio de
Chichibu, Japón. En la ladera de una colina
de Chichibu, al Norte de Tokio, los
arqueólogos japoneses reportaron el hallazgo
de restos de lo que llamaron "la estructura
artificial más antigua del mundo". La
evidencia tenía la forma de diez agujeros
para postes, horadados en la roca sólida.
Los diez agujeros estaban arreglados
rudimentariamente en dos formas
pentagonales, indicando que los postes
insertados en los agujeros formaban la
superestructura de dos chozas. También se
encontraron en el sitio herramientas de
piedra, las cuales indicaron una edad de
500,000 años.
La construcción de refugios artificiales es
algo considerado usualmente como
característica de los humanos anatómicamente
modernos. Pero debido a que se piensa que
los humanos anatómicamente modernos no
existían hace 500,000 años (la evidencia más
antigua, de esqueletos parecidos a los
nuestros, data de hace 100,000 años), los
arqueólogos atribuyen los refugios de
Chichibu al hombre-mono Homo-erectus. Chris
Stringer, del grupo que estudia los orígenes
humanos en el Museo de Historia de Londres,
Inglaterra, dijo: "es la primera buena
evidencia de hace 500,000 años, de una
estructura de choza elaborado por esta gente
[Homo erectus]".
Otros arqueólogos comparten la sorpresa de
Stringer, en relación a que el Homo erectus
pudiera haber logrado este nivel de cultura.
"Si usted cuenta con agujeros para postes,
esto constituye una situación excepcional en
términos de lo que sabe la arqueología
acerca de los homínidos", dijo John Rick, un
antropólogo de la Universidad de Stanford.
"Hace medio millón de años atrás, no tenemos
idea de lo que nuestros ancestros eran
capaces de hacer".
Pero este sentido de sorpresa puede estar
basado en un conocimiento incompleto de la
historia de nuestra especie humana. En mi
libro "Forbidden Archeology", documenté
evidencias de la presencia de humanos
anatómicamente modernos en Asia, para el
mismo período de tiempo representado por el
descubrimiento del sitio Chichibu en Japón.
Por ejemplo, en 1958, unos trabajadores
encontraron huesos humanos en la cueva de
Liujiang, al Sur de China. En 1985, dos
prominentes científicos Chinos, Han Defen y
Xu Chunhua, identificaron lo huesos como
pertenecientes a la especie de humana
anatómicamente moderna, Homo sapiens sapiens.
En base a esto, se le atribuyó a los huesos
una edad relativamente reciente. Pero los
huesos fueron encontrados en las mismas
capas donde se hallaron los huesos de
animales fosilizados del período
Pleistoceno, el cual se extendió de 100,000
a 1 millón de años atrás. En todas partes
del mundo existe abundante evidencia de que
los humanos anatómicamente modernos
estuvieron presentes hace 500,000 años, o
antes. El esqueleto humano anatómicamente
moderno, encontrado por el científico alemán
Hans Reck, en 1913, estaba incrustado en un
estrato que correspondía a más de 1 millón
de años de antigüedad. Un cráneo, también
anatómicamente moderno, fue encontrado a una
profundidad de 45 pies, en Buenos Aires,
Argentina, también en estratos de hace 1
millón de años de antigüedad. Este
descubrimiento fue reportado por el geólogo
Argentino Florentino Ameghino en 1909. Estos
son solo dos de los muchos casos que podrían
ser citados.
Entonces, habiendo encontrado evidencia de
chozas con 500,000 años de antigüedad en
Japón, no es necesario para los arqueólogos
elevar al Homo erectus al estatus de humano.
Si consideramos toda la evidencia
disponible, el descubrimiento de Chichibu
puede ser interpretado como evidencia de
humanos anatómicamente modernos en Japón,
hace 500,000 años atrás.