Al
leer este hermoso texto de Julio Andrés Pagano, pensé que le iba
como anillo al dedo a la convocatoria hecha por Soliman Or del 1
de Mayo en Sevilla (ver
anterior artículo del blog). Como bien dice Julio, es tiempo
de unión, de juntar nuestros diseños sagrados para lograr una
potente figura capaz de transmitir su armonía y su luz a través
de los campos mórficos al resto de la humanidad. Hagamos todos
lo posible para asistir a este encuentro de los Hijos del Sol,
que son los Hijos de la Conciencia, para conectar con Kinich
Ahau, el Sacerdote del rostro solar. ..
“El aura de este mensaje irrigará de amor todo tu ser, para que
la comprensión te ilumine sabiamente. Tu corazón lo presiente.
Las hebras deben entrelazarse aún más para potenciar el
brillante entramado que anunciará, al universo, que la humanidad
ha despertado de su largo sueño de inconsciencia. Suena la voz
interna, se anuncia el reencuentro de almas afines. Tu espíritu
lo sabe. La luz te aclama. Es tiempo de unión.
Todo estuvo dispuesto para ayudarte a crecer. La soledad
presenció tu incesante esfuerzo y dedicación. Internamente
suponías que otros, a quienes no conocías, también estarían
viviendo un proceso similar de aprendizaje. Tu intuición te
mostrará que estabas en lo cierto. Hermanos peregrinos acudirán
a tu encuentro para emprender la noble tarea de elevarse en la
unidad, anclando espacios de amor y luz a través de la materia.
La sensación de inmovilidad te ayuda a que te abras para tomar
las manos de aquellos que, como tú, están dispuestos a
manifestar frecuencias cristalinas. Nuevos códigos se activarán
a raíz de los encuentros. Las diferentes vibraciones co-crearán
geometrías sagradas de belleza sin igual. La esencia divina
brotará desde los corazones de manera creativa. El caos dará
paso al orden y podrá contemplarse la paz del equilibrio.
No dejes que el descreimiento te confunda. Una poderosa energía,
que ahora te abraza tiernamente, se hace presente para
recordarte que esto no es una utopía. Siente. Fuiste convocado
para romper las cadenas de la opresión y la barbarie. Encarnaste
para transformarte y transformar. Ahora llegó el momento de
expresar tus dones y talentos en comunión con aquellos que
dijeron sí a la hora de aceptar el firme compromiso de servir.
Puede sentirse. Comienza la movilización. Hombres y mujeres de
todo el mundo harán historia cumpliendo su palabra de honrar la
vida, abriéndose para dar paso a la luz. Hombro con hombro, alma
con alma, corazón con corazón, así, juntos y conscientes,
daremos cuenta de que lo que algunos llaman ilusión ya es una
realidad palpable. Estrechemos nuestros vínculos. Que destelle
el entramado. Es tiempo de unión.”