Tras quince años de espera, Almería ha reabierto el centro que custodia la mejor colección de piezas de Los Millares y El Argar. Un museo único e innovador, que cautiva al visitante.
FICHA TÉCNICA DIRECCIÓN Carretera de Ronda, 91 04005 Almería
INFORMACIÓN Teléfono: 950 64 98 00 Fax: 950 24 57 92 museoalmeria.ccul@juntadeandalucia.es
ACCESO Martes, de 14.30 a 20.30 horas. De miércoles a sábado, de 9 a 20. Domingo, de 9 a 14.30. Lunes, cerrado. Visita gratuita para ciudadanos y residentes en la UE. Otros visitantes: 1,50 €
ACTIVIDADES Talleres (de alfarería, iluminación prehistórica, instrumentos musicales). Programas educativos.
DIRECCIÓN WEB www.juntadeandalucia.es/cultura/museos/MAL
"A la provincia de Almería sólo le faltaba un techo para ser un inmenso e insuperable Museo de Prehistoria", comentó en una ocasión Luis Siret, el llamado padre de la Arqueología del sureste español. Siret, un ingeniero de minas belga nacido en 1860, había llegado a España con apenas veinte años, atraído por los relatos de su hermano mayor, Henri, acerca de los descubrimientos arqueológicos que estaba realizando, desde 1878, en Cuevas del Almanzora (Almería). Contratado por la Compañía Minera de Sierra Almagrera (segunda cuna del plomo almeriense, después de Sierra de Gádor), Luis Siret desarrolló durante los primeros siete años de su estancia en la provincia una intensa actividad arqueológica, excavando y estudiando numerosos yacimientos, que sirvieron para montar la primera secuencia prehistórica del sureste peninsular, desde el Paleolítico hasta la Edad de los Metales. Nunca más abandonaría la región. Conducido, en ocasiones, por los propios vecinos de los pueblos, que les invitaban a él y a su hermano a conocer los restos de algún "rey moro" que había habitado en el pasado en el lugar -como se pensaba-, Siret acabó por descubrir dos de las culturas más importantes de la Prehistoria: Los Millares y El Argar, que desenterró en su práctica totalidad y divulgó, en aquella España que despertaba a las grandes campañas arqueológicas, por toda la comunidad científica. En 1933, el investigador veía finalmente hacerse realidad su sueño, con la creación, el 28 de marzo, del Museo Arqueológico Provincial de Almería. Siret cedía al centro los ejemplares duplicados o repetidos de la colección que había donado al Museo Arqueológico Nacional de Madrid. Un año después, en 1934, fallecía en su casa de herrerías. Cueva de Zájara
Aquellas primeras colecciones -declaradas Monumento Histórico Artístico en 1962- quedaron parcialmente ocultas en 1991, cuando, debido a los problemas estructurales que planteaba el edificio (un antiguo Colegio menor construido en los años cuarenta), se decidió clausurar las salas de exposición. Este año 2006, tras quince años de espera, el ahora Museo de AImería ha reabierto sus puertas, en un nuevo edificio levantado sobre los antiguos terrenos del colegio. La reinauguración -el pasado 23 de marzo ha recuperado para el público unos fondos muy amplios y variados que, cronológicamente, abarcan desde el Paleolítico Medio (Cueva de Zájara) hasta el final de la Edad Media. Una amplia colección etnográfica, con cerámica popular, trajes regionales y armas. Y, sobre todo, la mejor colección de fondos de aquellas culturas descubiertas por los Siret. Ambas singularizan al museo, de ahí que el nuevo discurso expositivo planteado por sus responsables orbite en torno a ellas. La especialización permite huir del habitual centro enciclopédico de estrictas y compartimentadas secuencias, con sobreabundancia de objetos en las vitrinas, para dar paso a un planteamiento más funcional. Máquina del tiempo
El resultado es para el visitante como adentrarse en una máquina del tiempo, capaz de conducirlo no sólo a través de la historia almeriense, sino del mundo mediterráneo al completo, con sus milenarios vínculos comerciales, conquistas y sucesión de dominios. Así lo demuestran, por ejemplo, un Aríbalo corintio de arcilla y un Anforisco jonio, también de arcilla, de los siglos VI a.C.; un Relieve íbero procedente de Villaricos; una delicada imagen paleocristiana del Buen Pastor, y una Escultura de Dionisios (en la imagen), de mármol blanco y pigmento rojo, del Alto Imperio Romano, que preside la sala dedicada a esta civilización. . Vocación didáctica El nuevo edificio dedica casi dos mil metros a la exposición de los fondos del museo. Exhibe, en total, 904 piezas de entre las más de 84.000 que custodia. Pero, a diferencia de otras instituciones, el eje que vertebra la muestra es, junto al rigor científico, su vocación didáctica. El uso de elementos interactivos y recursos museográficos de gran impacto y la estética de los montajes atrapan al visitante desde el principio. Entre ellos, destacan la Nube de Siret, la columna estratigráfica de trece metros de altura que atraviesa las tres plantas del centro, la Tumba de Los Millares (en la imagen) y la rampa de El Argar.
Escultura de Dionisios, mármol, segunda mitad del siglo II.
OTRAS PIEZAS DE INTERÉS Cuenco del yacimiento de Los Millares El museo custodia la mayor colección de piezas del yacimiento, uno de los más importantes de la Prehistoria europea y la cultura más importante del Calcolítico en la Península. Entre ellas, este cuenco de casquete esférico realizado en arcilla y con decoración incisa. Los Millares (3500-2250 a.C.) se caracteriza por sus tres líneas de murallas con fortines para controlar los accesos.
Copa argárica El Argar es un yacimiento que ha dado nombre a una cultura del Bronce extendida por Almería, Murcia, Granada y Jaén, de la que se conocen numerosos enterramientos. Su grado de evolución hizo pensar durante mucho tiempo en un origen extrapeninsular, aunque hoy se considera que constituye la fase avanzada de una antigua tradición metalúrgica autóctona. Esta copa de arcilla se fecha entre 1800 y 1200 a.C.
|