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LOS PRIMEROS
HABITANTES DE EUROPA
Geología de la cuenca
Guadix-Baza
Contiene el registro
sedimentario más continuo de los ultimos
7 millones de años
La diferenciación
paisajística más notoria entre las Hoyas
de Guadix y Baza es la coloración
Julio Aguirre
La cuenca de Guadix-Baza se extiende
según una orientación nordeste-sudoeste.
Es, probablemente, una de las zonas de
mayor contraste paisajístico de
Andalucía oriental, donde relieves
llanos y bajos quedan circundados por
grandes sistemas montañosos. Este
encajamiento del paisaje le confiere a
la zona un carácter cerrado, del cual
deriva el nombre de Hoya, popularmente
usado tanto para la zona de Guadix como
para la zona de Baza. La homogeneidad de
esas zonas bajas se ve interrumpida por
las espectaculares hendiduras en el
relieve causadas por la acción
excavadora de las ramblas, ríos y
arroyos que dan lugar a las denominadas
cárcavas.
Coloración
La
diferencia más notable, si cabe, entre la
continuidad paisajística entre las Hoyas de
Guadix y de Baza es un apreciable cambio de
coloración en el paisaje, de tonos rojizos
vivos en la Hoya de Guadix a tonos más
blanquecinos en la Hoya de Baza. Ambas zonas
se encuentran separadas por un área algo más
escarpada, una cresta topográfica formada
por las estribaciones occidentales de la
Sierra de Baza, el Jabalcón y las
estribaciones meridionales de las Sierra de
Cazorla y Segura. Desde un punto de vista
geológico, la cuenca de Guadix-Baza es una
de las depresiones intramontañosas que
jalonan el contacto entre las Zonas Internas
(o Dominio de Alborán) y las Zonas Externas
(o Margen Sudibérico), dos grandes conjuntos
estructurales que conforman la Cordillera
Bética. Materiales pertenecientes a las
Zonas Internas bordean la cuenca por su
margen sur y sudeste (Sierra Nevada, Sierra
de Baza y Sierra de las Estancias), mientras
que los relieves de las Zonas Externas se
localizan en todo el perímetro
norte-nordeste (Sierra Arana, Sierra de
Cazorla, Sierra de Segura, Sierra de Castril
y Sierra de Orce). Los materiales que
constituyen el Jabalcón, relieve que aflora
en la zona limítrofe entre la Hoya de Guadix
y la Hoya de Baza, también pertenecen a las
Zonas Externas.
Antigüedad
Los
sedimentos más antiguos reconocidos en la
cuenca de Guadix-Baza se remontan al periodo
de tiempo geológico conocido como
Burdigaliense (Mioceno inferior), hace
aproximadamente 20 millones de años. A
partir de entonces, la historia de la cuenca
se continúa hasta un periodo relativamente
reciente de la historia de la Tierra
conocido como Pleistoceno superior, hace tan
sólo unos diez mil años.
Etapas
A lo
largo de toda esta historia, registrada en
los sedimentos que se han ido depositando,
la cuenca no ha permanecido estable sino que
tanto su fisiografía como las condiciones
ambientales han ido cambiando a lo largo de
estos casi 20 millones de años de historia.
Se pueden diferenciar dos grandes etapas.
Una primera, desde los primeros sedimentos
registrados en la cuenca hasta el final del
periodo de tiempo geológico denominado
Tortoniense (hace algo más de 7 millones de
años), en la que se depositaron materiales
formados en diferentes medios marinos; y una
segunda, a partir de este momento, en el que
la cuenca de Guadix-Baza cambia radicalmente
al quedar completamente aislada del mar.
Esta segunda fase está marcada por el
apilamiento de sedimentos exclusivamente
continentales.
Esta
segunda etapa es particularmente
interesante, ya que comprende el registro
sedimentario más continuo de medios
continentales de los últimos 7 millones de
años de la historia de la Tierra que existe
en la Península Ibérica y en todo Europa
occidental. Asímismo, es en estos depósitos
donde han quedado registrados los indicios
de actividad humana en la zona de Orce.
Prueba del interés que estos depósitos han
despertado es la voluminosa producción
científica que se ha producido,
especialmente a partir de los años setenta.
Gracias a estos estudios se han podido
establecer con bastante precisión las
divisiones de los diferentes conjuntos de
rocas que configuran el relleno de la
cuenca; la naturaleza de dicho relleno
sedimentario; la evolución tectónica y de
estructuración de la cuenca hasta alcanzar
la configuración que conocemos en la
actualidad; la historia climática de la
cuenca; etc.
Escala temporal
Todo
esto ha sido posible gracias al
establecimiento de una escala temporal muy
precisa de los grandes eventos que han
condicionado y controlado el modelado de la
depresión.
El
registro sedimentario continental de la
cuenca de Guadix-Baza está caracterizado por
la instalación de sistemas fluviales y
lacustres en diferentes épocas. Los
sedimentos correspondientes a los depósitos
fluviales son, generalmente, conglomerados y
arenas, mientras que en los medios lacustres
se formaron, fundamentalmente, arcillas y
materiales de precipitación química, como
calizas y yesos. Los primeros materiales de
estos sistemas continentales que se
reconocen en la cuenca de Guadix-Baza se
depositaron durante el periodo de tiempo
denominado Turoliense superior (entre 7,5 y
5,7 millones de años). Durante este
intervalo de tiempo, la cuenca de Guadix-Baza
fue un estrecho lago orientado
sudoeste-nordeste donde se depositaron
arcillas. Depósitos fluviales de
conglomerados y arenas llegaron a la cuenca,
principalmente desde los relieves que la
bordeaban por su margen septentrional. Hacia
el final del Turoliense se produjo un cese
en la sedimentación de unos 600.000 años.
La
sedimentación se reanudó hace unos 5
millones de años y se continuó hasta hace
unos 3 millones de años, durante el periodo
de tiempo denominado Alfambriense. En este
periodo se formaron potentes depósitos
lacustres, caracterizados por la formación
de arcillas y calizas. Hacia el final del
Alfambriense algunos ríos, procedentes sobre
todo de los relieves situados al sur de la
cuenca, descargaron sus sedimentos en este
lago.
Depresión
Hacia
la base del siguiente intervalo temporal,
conocido como Villaniense (o también
Villafranquiense), la sedimentación volvió a
interrumpirse unos 400.000 años y se produjo
una fuerte reestructuración paleogeográfica.
Si bien la cuenca había sido hasta ahora una
estrecha zona que se extendía según una
dirección sudoeste-nordeste, en este momento
se originaron dos zonas deprimidas que se
correspondían con las actuales Hoyas de
Guadix y de Baza. Es decir, comenzaba a
vislumbrarse la configuración fisiográfica
actual. Tras la interrupción, la
sedimentación se reanudó hace unos 2,7
millones de años (en el Villaniense) y se
continuó hasta hace unos 850.000 años (en el
final del Pleistoceno inferior). Durante
este nuevo episodio de sedimentación la zona
de Baza quedó diferenciada de la de Guadix.
En la primera se desarrolló un extenso lago
donde se depositaron arcillas, calizas y
yesos. Es en estos depósitos lacustres donde
han quedado registrados los indicios de
actividad humana de Orce. Por su parte, en
la zona de Guadix se generó un sistema
fluvial, alimentado por pequeños abanicos
aluviales procedentes de Sierra Nevada y
Sierra de Baza, que transportaba
conglomerados y arenas hacia el lago
originado en Baza.
Después de unos 200.000 años de
interrupción sedimentaria, durante el
Pleistoceno medio y superior se formaron
depósitos fluviales que se extendieron por
toda la cuenca. Estos depósitos fluviales
corresponden a ríos procedentes
fundamentalmente de los relieves que
circundaban la cuenca por su margen
meridional (Zonas Internas de la Cordillera
Bética). Pequeños lagos se desarrollaron
temporalmente en la zona de Guadix.Hace unos
10.000 años la cuenca de Guadix-Baza dejó de
recibir sedimento y comenzó una historia
caracterizada por la erosión.
Es,
por tanto, en estos últimos 10.000 años
cuando se genera el característico paisaje
de cárcavas y el profundo encajamiento de
las ramblas y ríos de la zona hasta adquirir
el aspecto que conocemos en la actualidad.
Julio Aguirre: Premio Príncipe de
Asturias, Iniciador y primer director
del Proyecto Atapuerca. Ha sido profesor
en numerosas universidades, catedrático
en la Complutense de Madrid, Profesor de
Investigación en el Consejo Superior de
Investigaciones Científicas. Fue
Director del Museo Nacional de Ciencias
Naturales. Ha dirigido investigaciones
en numerosos yacimientos paleontológicos
y arqueológicos de nuestro país. Fue el
introductor de la Paleontología de
Vertebrados en Granada.
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