2012 – La Nueva Tierra Ascendida y el despertar del corazón humano
Los meses de septiembre y octubre trajeron una energía de relativa calma, de recogimiento y preparación para la gran sinfonía final del este año: el 11-11-11, los eclipses de noviembre y diciembre (eclipse de sol en luna nueva de 25 de noviembre y eclipse total de luna en luna llena de 10 de diciembre) y el solsticio del 22 de diciembre, que junto con la luna nueva de nochebuena del 24 de diciembre (luna de transmutación kármica y de apertura a la conciencia Crística en nuestras relaciones familiares), nos llevará directamente a la energía de la gran transformación de nuestra conciencia y de nuestro mundo del 2012.
La gran energía del cambio que lleva ya décadas abriéndose y que a lo largo del 2012 podremos experimentar y estamos ya experimentando como un gran deslizamiento de nuestra conciencia, de nuestra forma de estar en el mundo. Tenemos delante una gran aventura conforme se acercan las fechas críticas del 2012 (12-12-12, solsticio diciembre 2012 y equinoccio marzo 2013). No va a ocurrir nada, no se va a acabar el mundo, pero tras los dos años siguientes venideros habremos entrado en un nuevo mundo prácticamente irreconocible para la vieja conciencia del miedo, la muerte y la separatividad. Una gran aventura que exige vaciarse completamente de todo lo conocido, abrirse a todas las posibilidades y dejar que un nuevo mundo se plasme a través nuestro, vaciados de las viejas ideas, de las viejas creencias y de las viejas fabricaciones de la mente emocional, la mente del ego. Un gran regalo que nos abre a un mundo mágico, donde nuestro poder de creación, desde la conciencia – la energía Crística a través de nosotros, será cada vez más poderoso.
El despertar del corazón humano (4º chakra, el chakra del corazón) es el proceso en el que está embarcada en estos momentos la humanidad y supone el acceso a un nuevo mundo, a una nueva dimensión crística de la conciencia. La segunda venida de Cristo es el Cristo en el corazón de cada ser humano, es la entrega al Poder del Espíritu a través de la rendición completa del ego, el yo personalista que ha creado y ha fabricado este mundo que estrepitosamente se viene ahora abajo. El mundo del ego da paso a un nuevo mundo, el mundo del Espíritu, el mundo del verdadero Ser como canalización de la energía del Amor en el Universo. La Nueva Tierra Ascendida es el reflejo en la materia de esa conciencia crística que ahora despierta en el corazón humano. La Nueva Tierra Ascendida de quinta dimensión ya existe en una realidad paralela. Está aquí y ahora, al lado tuyo, esperando que la habites con tu voluntad verdadera y tu intención. Es un mundo mágico donde las cosas ocurren de una manera muy distinta al mundo del miedo que conocemos y que una parte de la humanidad, la vieja conciencia que ha dominado por milenios nuestra amada Tierra, se empeña en prorrogar bombardeándonos con sus terribles medios de comunicación e intentando convencernos por todos los medios de que ese mundo del miedo, la guerra, la enfermedad y la muerte es el mundo real.
Toda la matrix de nuestro viejo mundo de 3ª dimensión está fabricada para mantenernos atados al miedo y de esta forma separada del Espíritu y de la fuente de energía. Los cinturones de seguridad que bloquean nuestro hara (2º chakra) y nuestro pecho (4º chakra), los cada vez más usados cascos para patinar, para ir en bici…, las gafas oscuras de sol y las cremas de protección solar que nos separan de la gran fuente de energía como si fuese algo que hay que temer, las estadísticas que nos cuentan el inexorable mundo de los accidentes y de la muerte inevitable, las pandemias, las gripes A, los SIDAS y todas las enfermedades inventadas. Todo nuestro llamado «sistema de salud» que nos roba todo el poder sobre nosotros mismos y toda la responsabilidad de nuestros cuerpos en aras de un, «¿qué me pasa doctor…?». Y toda la parafernalia de amenazas contadas y de razonables protecciones que debemos usar para protegernos de ese mundo amenazante, es la sinfonía propagada por la oscuridad para mantenernos ignorantes de nuestro propio poder y atados a la visión esclavizante del mundo que esa vieja conciencia propugna.
No nos es fácil aceptar y acostumbrarnos a la multidimensionalidad desde una vieja conciencia atada a la idea de una sola realidad independiente de nuestra voluntad. Sin embargo la realidad no es única y lo que tenemos que entender es que existen múltiples, incontables realidades paralelas. Que el guardia civil que espera a la salida de una curva para ponerte la multa («por tu bien») por no llevar el cinturón aprisionado a tu chakras, existe sólo en una determinada frecuencia del espectro de realidades. Que la voz en «off» que te advierte por la megafonía del metro de Barcelona de que cuides tus objetos personales, pues los carteristas «acechan» a la espera de cualquier descuido tuyo para llevarse tus pertenencias, quiere convencerte de que es esa la única realidad existente para que tu no puedas escapar y decidir qué mundo quieres contemplar. Sin embargo lo que tenemos que entender es que cada uno, consciente o inconscientemente, elije en que realidad se sitúa. Que la realidad la creamos nosotros con nuestra propia conciencia y luego elegimos el mundo que queremos ver con nuestros ojos y experimentar como «nuestra realidad».
La realidad no es única y tú tienes todo el poder de decidir situarte en la paja o en el grano. La Nueva Tierra supone la «separación del grano de la paja», pero no porque nadie lo vaya a decidir. Nadie más va a decidir por ti, y sólo con que tu elijas cambiar tu conciencia, separándote de las viejas ideas, programaciones, emociones y formas de la vieja frecuencia de tercera dimensión, te habrás separado de la paja y estarás en un mundo nuevo que te sorprenderá por su magia, su luz y su brillantez. Podrás mirar al sol directamente, no necesitarás incluso ni comer, puesto que realmente el cuerpo físico nunca se ha creado «desde la comida», y los «milagros» serán cada vez más la forma normal de manifestarse la conciencia en ese nuevo mundo.
El miedo y la culpabilidad son los pilares de la vieja conciencia que mantiene esclavos de un mundo de matrix sin sentido que indefectiblemente acaba en la separación y en la muerte, y el sentido de todos los eventos astrológicos que tan poderosamente hemos estado experimentando en los últimos años es darnos la oportunidad de «soltar» esa vieja conciencia, esa vieja mente, para abrirnos a la mente espiritual, la mente cósmica que se manifiesta a través nuestro, nuestra verdadera herencia y nuestra verdadera naturaleza.
Ese es el sentido de todos los eventos astrológicos (eclipses, conjunciones…) y numerológicos (8-8-8, 11-11-11, 12-12-12…) . No existimos sólo en este reducido plano material que vemos (realmente medio-vemos) con los ojos de cuerpo. Existimos en muchos otros planos. Es más, este plano que vemos con los ojos es una reducidísima parte de nuestra realidad. Y más importante aún, no es una causa sino un efecto de los otros planos. El cuerpo, el mundo material que experimentamos como nuestra vida diaria, no es una causa, sino un efecto. Así que los eventos astrológicos y numerológicos son brechas en la percepción de nuestro mundo que nos dan la oportunidad de recibir las energías superiores y de actuar sobre «la causa».
La Ascensión es un evento cósmico, no sólo de la Tierra, ni siquiera del sistema solar y vivimos en un momento de tremendo aumento de la energía cósmica (cinturón de fotones, alineación con el centro galáctico, enorme aumento de la actividad solar, cambio magnético de la tierra…). Una luna llena con eclipse total de luna en estos momentos es una gran oportunidad de actuar sobre nuestro cuerpo astral, ese cuerpo de 4ª dimensión donde residen la mayoría de las causas de lo que experimentamos (o «sufrimos») como nuestra experiencia de vida en la Tierra. Toda la contaminación de las creencias, de las limitaciones sobre nosotros mismos, de la contaminación emocional que nos esclaviza, de nuestro pasado, reside en su mayoría en esa cuarta dimensión. Ahí están los dioses creadores, los arquetipos que han programado nuestra mente para convertirnos en obedientes esclavos y soldados de esta realidad. Y un eclipse total de luna, después del gran portal 11-11-11 y a las puertas de la energía de inflexión que llamamos 2012, es una apertura en el velo que envuelve ese mundo astral inconsciente, una apertura por la que podemos introducirnos para traspasar al otro lado. La clave es la conciencia. Desde la conciencia podemos invocar la luz de nuestro ser crístico, la luz de los maestros ascendidos, la luz de nuestros guías espirituales, para que nuestra energía sea definitivamente llevada más allá de esa realidad que nos ha esclavizado en el pasado.
Los eventos cósmicos, aunque se manifiestan en nuestra escala de tiempo lineal, se producen sin embargo en una escala del tiempo cósmico que transciende nuestro concepto de pasado, presente y futuro. Es por eso por lo que podemos decir que el evento de la luna llena y del eclipse de luna del día 10, al igual que el 11-11-11, el 2012, el equinoccio de marzo del 2013, o de cualquier otro evento futuro o pasado, es en este momento que estás leyendo estas líneas. A los efectos prácticos de nuestra escala de tiempo, podríamos decir sin embargo que los efectos de un evento como el próximo eclipse y luna llena, se mueven en un portal de tiempo de varios días e incluso semanas hacia atrás y hacia adelante de la fecha concreta donde ocurren. En ese portal de tiempo, cuyos efectos para el eclipse-luna llena del día 10 ya podemos estar sintiendo, se produce el principal trabajo a nivel de nuestro cuerpo energético, mental, astral y emocional. Es a través de nuestra entrega y de nuestra conciencia en ese portal de tiempo como podemos permitir que las nuevas energías queden ancladas en todos nuestros cuerpos. La fecha concreta del evento sigue sin embargo teniendo importancia como un acto de reafirmación en el no-tiempo de nuestra intención y de nuestra elección. Es por eso por lo que los rituales y ceremonias con las que acogemos y celebramos este tipo de eventos, sigue teniendo su función e importancia en todo nuestro escenario de evolución.
La Nueva Tierra Ascendida existe en una realidad paralela de 5ª dimensión. Es a través de la energía del chakra del corazón como se accede a dicha dimensión. La Tierra Ascendida está aquí y ahora en el mismo lugar donde tú te encuentras. Es simplemente una frecuencia distinta en la escala cuántica de vibración de la materia. Si sintonizas con esa frecuencia a través de tu cuerpo, de tus chakras, y de tu conciencia, estarás viviendo en otra realidad paralela donde rigen unas normas distintas que en la vieja tierra de 3ª dimensión. La magia y los milagros son posibles en esa dimensión, como expresiones de creación de la energía del corazón. Todo el poder creador del Espíritu se manifiesta a través del espacio sagrado del corazón y la verdadera creación comienza en esa energía del chakra del corazón.
¡Feliz fin de 2011 y entrada al fabuloso 2012 – El despertar del chakra del corazón – La Nueva Tierra Ascendida!
INFORMACIÓN FACILITADA DESDE – ASCENSIÓN NUEVA TIERRA