¡SOMOS EL MILAGRO! Este mensaje explica por qué «Tawa» significa «Sol» en Hopi y «Luna» en Tibetano
Roy Littlesun
Lo que une estos dos significados diferentes de la misma palabra es la Única Madre Tierra y esta Unidad también podemos encontrarla en nuestro Corazón. Nuestro corazón late gracias a la sangre, que interacciona todas las células de nuestro cuerpo. ¿Por qué hace esto la sangre? La sangre es la transmutación biológica de la comida. La comida es el resultado de la acumulación concentrada de las energías ambientales y este reino se extiende hasta el Infinito.
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Fuera de nuestro Sistema Solar las energías del Universo se concentran alrededor de las estrellas. Todas las estrellas inter-conectan unas con otras por medio de sus rayos de luz. Nuestro Sol (que se correlaciona con nuestro Corazón) es la estrella que tenemos más cercana y el planeta Tierra recibe las energías del Cielo por medio de su luz. Por esta unión de Cielo y Tierra crecen las semillas hasta convertirse en plantas (comida). Cuando comemos, las estrellas externas se transforman en estrellas internas (las células del cuerpo). Así pues, de manera similar a como el Sol se interconecta con todos los otros Soles, nuestro Corazón consigue la unión con todos los soles internos por medio de la circulación de la «luz solar licuada» (Sangre).
Antes de que la energía de las estrellas alcance el Sol, sienten la influencia y se organizan por las doce constelaciones o cuerpos celestes. Este reloj celestial regula el ritmo del flujo de energía antes de que nos demos cuenta de que nuestro corazón late. Estas doce constelaciones se manifiestan dentro de nosotros como los doce órganos u organizadores. Al final, cuando la Tierra capta la energía de las estrellas, estas se convierten en la ecología y los ciclos del planeta. Esto también se manifiesta dentro de nuestro cuerpo.
Nuestra sangre está sincronizada con el agua del océano, pues ambas tienen la misma composición mineral y salinidad. El latido de la sangre resuena con las olas del mar. Los pulmones se convierten en nuestros bosques internos y al respirar mantenemos esta interrelación. Los ríos son nuestras venas, los lagos nuestro hígado, los manantiales nuestras glándulas salivales, la lluvia nuestro sudor, los vientos nuestro aliento, los truenos se convierten en nuestra palabra, los rayos en nuestra visión, las vibraciones atmosféricas son nuestra habilidad de pensamiento, etc. La Luna refleja al Sol e internamente se manifiesta como nuestros sentimientos. Físicamente, la Luna es representada por el pericardio (uno de los doce órganos, donde el corazón está contenido). A través de ella podemos hacernos conscientes de lo que está dentro y fuera. Si tenemos salud verdadera, gracias a la pureza de nuestra sangre, podemos vivir la gran alegría de la Libertad en el círculo de la Luz.
El grado de sincronía o Unidad entre las «estrella interiores» y las «exteriores» depende básicamente de nuestra forma de comer. Comiendo la comida universal, podemos retornar a los Cielos con un mayor sentido del Ser. Las plantas extienden las radiaciones de la Tierra; los rayos solares la impregnan. Para que estas energías Terrestres puedan ascender más allá de su medio ambiente, necesitan ser organizadas dentro de un cuerpo que pueda contener la integridad de la Tierra, y también tener la habilidad biológica de transmutar la comida en frecuencias más altas de energía.
Esta ascensión comienza con la integración del centro de la Tierra (hierro, Fe) alrededor del cual se centra su complejidad, convirtiéndose en el núcleo de nuestra sangre. Entonces, a donde quiera que nuestra sangre circule, podemos sentir, radiando así la energía de la Tierra a través del Potencial Humano más allá de la Luna, hasta los más distantes ámbitos del infinito universo.
En pocas palabras, cuanta más esencia podamos extraer de la memoria de la comida en nuestra sangre, más le «gustamos» a Quien come a un nivel más elevado. En última instancia, nos convertimos en comida para el Creador. ¡La auto realización es convertirse, completamente, en comida para el Creador Interior! Por esta razón debemos digerir nuestra comida totalmente, para poder recordar quién somos en realidad.
El Control
La mayoría de los humanos de hoy carece la sincronía de la unidad entre la Creación externa y la Creación interna. Esta desarmonía es la causa raíz de la enfermedad, de la inestabilidad mental y de patrones de comportamiento trastornado. No puede haber paz, justicia, libertad o alegría en el mundo cuando las masas sufren la violencia interna entre las «estrellas interiores» = ¡La guerra de las galaxias!
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La enfermedad es la guerra interna, la adicción es la esclavitud interna, la infelicidad es el estancamiento del espíritu. En lugar de un flujo de sangre limpio y armónico, esta obstrucción se manifiesta como dolor, hinchazones (incluyendo la obesidad), quistes, tumores, piedras, recelos, inseguridad, miedo, celos, odio, ira…
En vez de resolver los problemas del mundo restaurando nuestra verdadera salud -limpiando los escombros internos- se utilizan métodos para seamos capaces de vivir con esta contaminación. Se prefiere el «síndrome del problema» porque el mundo se ha conformado con sistemas con los cuales parece que nos sentimos cómodos (insensibles al Tawa interno (Sol/Luna)). Por consiguiente, la ciencia y la tecnología del sistema, utilizando energía procedente de fuentes artificiales, privan a nuestro cuerpo/mente/emociones de la comida verdadera necesaria para mantener el sistema saludable y estable. Un cuerpo/mente/emociones débil puede ser controlado y explotado mucho más fácilmente por un sistema centralizado. Este control se ha desarrollado a través del monopolio de:
Tierra – con la comercialización de la agricultura (plantaciones)
Cuerpo – con comida basura, medicina, medicamentos y drogas
Mente – con la educación, ciencia, medios de comunicación, política y dinero
Espíritu – con la manipulación de las condiciones atmosféricas, microondas, miedo, reforzamiento de las leyes diseñadas políticamente.
Debido a la pobre calidad de nuestra sangre, la mente ya no sabe distinguir lo correcto de lo incorrecto. Lo bueno ya no es bueno si el cuerpo depende de la correcta administración de la forma incorrecta de comer y sanar. Rindiéndonos a falsas creencias, nuestro espíritu puede ser forjado dentro de un mundo bajo control centralizado. Bajo el control de un gobierno centralizado corrupto, lo bueno sólo puede ser bueno cuando encontramos algo malo. Por lo tanto, las leyes reforzadas por este control se aseguran de que prevalezca lo malo para que la «bondad» del estado pueda sobrevivir. Con esta idea se cultiva la enfermedad, dando medicinas gracias a las cuales podemos «vivir» con la enfermedad. Por eso las prisiones son semilleros de delitos, porque ayudan a que el sistema judicial se mantenga en el poder. Tener «derechos» y «libertad» basados en leyes diseñadas políticamente puede mantener a las masas dentro de límites auto-impuestos. Así, podemos defender perpetuamente las fronteras haciendo «la guerra por la paz».
La pregunta: ¿Cuál es el significado universal de esta trayectoria no universal?
Nuestra Voluntad representa la Fuerza Creadora por la que fuimos creados y podemos continuar existiendo. Cuando esta fuerza interna se utiliza únicamente para mantener la Unidad entre lo interno y lo externo, podemos, como las piedras y las plantas, seguir existiendo. Sólo podremos contribuir del todo al potencial Humano si usamos nuestra voluntad para elegir. En otras palabras, para cultivar nuestro espíritu a niveles superiores debemos ser capaces de usar conscientemente nuestra voluntad o fuerza creadora interna para extender el presente, que es una acumulación del pasado. Elegir es extender conscientemente el presente eterno a través del discernimiento. Podemos crecer universalmente cuando entendemos de qué forma somos parte de la Creación. Sin embargo, con la «educación pública», nuestro crecimiento universal ha visto impedido su desarrollo. Por esta razón aparecen las adiciones, callejón sin salida que nos da la gratificación instantánea o la ilusión extrema.
Al tener la mayor integración de las energías del Cielo y la Tierra, el ser humano es el más capaz de desarrollarse desde el planeta y, por elección, puede dirigir la Fuerza por la que fue creado a niveles mucho más elevados de existencia. Debido a que sintiendo refleja el sol interno, el ser humano tiene gran habilidad para discernir y para crear su propio futuro y realidad, validando su ser al elegir. Somos capaces de expresar la voluntad ante el contraste más extremo al Orden de la Creación.
Al descubrir que podemos dirigir nuestra propia forma de sentir (la sensación resulta del contraste), podemos desviarnos de la Constante Absoluta (la Ley del Creador) y crear nuestras propias leyes para experimentar (mundo temporal). Así, pueden aparecer cosas nuevas y únicas que nos enseñen sobre nosotros mismos, nuestros límites y también sobre el mundo interminable del cambio – La Libertad. Esta es la base de la experimentación.
Cuando el experimento haya llegado a su fin, entonces podremos ver los límites del mundo que hemos creado bajo leyes temporales. Así se establece la condición por la que podemos hacer la elección definitiva y nuestra fuerza de voluntad podrá pasar la última prueba. Las opciones extremas a elegir son: «Ser» o «no Ser».
«no Ser»: continuar con el experimento y auto-destruirnos
«Ser»: regresar al mundo no experimental, la Creación, y disfrutar de la Libertad.
Actualmente existe el peligro de que el mundo se pueda destruir por el modo experimental del «Nuevo Orden Mundial». Un número creciente de personas se está haciendo consciente de la necesidad de parar y separarse del mundo controlado por el sindicato, haciéndose Soberanos bajo la Ley del Creador. Esto se hace básicamente a través de la Forma Sagrada de Comer; la comida es mucho más que nutrición.
En otras palabras
La raza Humana del planeta Tierra tiene que hacerse madura espiritualmente. La oscuridad del mundo fue necesaria para encontrar la luz interna. Los dolores de cuerpo, mente y espíritu nos llevan a la búsqueda del Sol que debemos radiar desde nuestro interior. Cuando el contraste entre la oscuridad de la Tierra y la luz del Cielo llega a un extremo, se puede hacer la elección definitiva. O elegimos continuar sufriendo, ciegos a nuestra luz interna, o elegimos encender la luz interna para iluminar al mundo con la PAZ- SÉ HOPI (individuo pacífico = el dos indivisible).
La primera elección requiere que sigamos el curso de la adicción hasta el final. La segunda necesita que purifiquemos el cuerpo con la medicina del Creador, la comida y el rezo. Sólo entonces podremos sanar nuestro corazón, confiar en nuestra mente y comprender el mensaje Tawa. Esta es la llamada de la alegría.
Además
La separación es igual que la limitación, la Unidad es igual que la Libertad. Todos respiramos del mismo Cielo y bebemos y comemos de la misma Tierra. Entonces… ¿qué nos hace dividirnos y hacer la guerra? Cielo y Tierra, tienen ambos el Mismo Origen. Esta fuente mantiene el Cielo y la Tierra con la Ley Única. Por la relación individual con esta constante absoluta se mantiene la unidad de la Humanidad.
Al no vivir según la Ley de las Leyes, la gente crea sus propias leyes y formas, construyendo así fronteras, que indican los límites de las leyes secundarias. Por consiguiente, la gente que reclama sus derechos bajo leyes secundarias, pelearán sobre lo que tienen en común: ¡sus limitaciones!. Esta es la ironía de la búsqueda actual de la «libertad» = hacer la guerra por la «paz». Esta ceguera se debe a la oscuridad que llevamos en nuestra sangre.
Realmente, la separación es igual a la limitación y conduce a la organización del crimen. Ha creado naciones en las que formas y cosas que eran libres originalmente tienen un precio y pueden ser monopolizadas. Hoy el principal interés de una nación es sobrevivir económicamente porque sus leyes prohíben a la gente que sea SOBERANA BAJO LA LEY DEL CREADOR.
La legalidad se asegura de que tengamos el derecho de «ganarnos la vida» a expensas de la vida misma; las leyes exclusivas justifican el asesinato de los que traspasen nuestras propias fronteras, el artículo que produce más beneficios son las armas, que apoyan a los costosos ejércitos requeridos para la defensa. Con esta locura, nos dicen por qué, cómo, quién, dónde y cuándo matar. Esta demencia ha llegado a su clímax al unir naciones bajo las mismas leyes que han creado tal desunión. El asesinato es apoyado bajo la supervisión de una economía centralizada y aquellos que no estén de acuerdo serán boicoteados económicamente y asesinados. Toda esta insensatez comenzó con nuestra separación del Orden de la Creación al destruir nuestra Unidad con la Creación.
El mundo está comenzando a acostumbrarse a condiciones meteorológicas extremas y a movimientos traumáticos en la naturaleza (vientos huracanados, inundaciones, erupciones volcánicas y terremotos) ante los que reaccionamos cambiando los intereses económicos, haciendo nuevos presupuestos y diseñando medidas proteccionistas, lo que realmente muestra la arrogancia y el estado suicida del mundo moderno.
Paralelamente, el cuerpo reacciona ante el desequilibrio interno con fiebre, vómitos, diarrea, convulsiones… y finalmente con enfermedades degenerativas. La naturaleza se mantiene a través del cambio de ciclos, lo que a su vez afecta a aquellos cuyo desequilibrio interno creó la inestabilidad ambiental. Esto es justicia.
Hemos de entender que debido a la Unidad entre nuestro ser interno y externo, la ecología del mundo se ve afectada por todo lo que hacemos con nuestro ser, física, mental o espiritualmente. Todo está inter-conectado. Pensar que podemos excluirnos de la Justicia Universal, ignorando la Unidad, indica la gran enfermedad del espíritu: la arrogancia. Esta peste puede curarse de dos formas:
Con cataclismos naturales, que aumentarán por nuestra persistencia en seguir la forma de vida experimental sobre el orden de la Creación. Por consiguiente, nuestras vidas acabarán de forma traumática por enfermedad (guerra interna) o guerra (enfermedad externa).
Ó
Siendo humildes y rindiéndonos por completo a la ley superior del Universo Infinito. Purificando nuestra sangre y restaurando nuestra Unidad con la Creación, haciéndonos SOBERANOS BAJO LA LEY DEL CREADOR. Es necesaria mucha Valentía para probar nuestra Voluntad haciendo la Elección a la Luz de la Verdad.
Con esta elección podemos ser verdaderos miembros de la Creación. La democracia falsa requiere que elijamos entre las opciones controladas por el sistema centralizado, haciendo que nos unamos a una mayoría de débiles («excluidos») dentro del contexto Universal. Esta es la minoría disfrazada. La libertad que esta «mayoría» busca tiene que ser defendida con la «guerra para la paz», por el dinero de los impuestos o la carencia de espíritu.
La conexión entre la libertad interna y eterna debería estar clara. Ahora podemos elegir entre la cobertura costosa y esclavizante (vivir con la enfermedad) que nos mantiene separados de la Creación, o ser Humanos de nuevo disfrutando libremente de la libertad. ¡Vota por el consenso de la Unidad!
Conforme los sonidos de la auto-destrucción se hacen más altos, la necesidad de escuchar el mensaje Tawa es mayor. La solución ha de venir de dentro, desde el punto de Silencio y Quietud. La elección es nuestra y puede hacerse independientemente.
Esencia del mensaje Tawa
La resonancia de la Verdad procede del Corazón Único.
Ser un Corazón Único se consigue con la pureza de la sangre, con cada latido de nuestro sol interno, el Corazón. Con la sincronía entre el latido de nuestro corazón y el Sol que todos compartimos, sentamos las bases para la armonía y la paz del mundo.
La pureza de nuestra sangre procede de la forma sagrada de comer, la práctica diaria de mantener la Unidad entre la Creación externa y la Creación interna.
La purificación pacífica del mundo comienza con el profundo deseo de servir a la Creación y con la purificación de nuestra sangre, que hace que el latido de nuestro corazón se sincronice con el centro de nuestro sistema solar, el Sol. Esta estrella está en sincronía con todas las otras estrellas -abriendo la puerta a las fuerzas del Universo y más allá, hacia el Sol de todos los soles. El mensaje Tawa es la llamada de la Libertad, ser Uno en el Círculo de Luz: el Reino dentro del Horizonte que Crece Interminablemente.
El Planeta Tierra, nuestra comida y nuestro cuerpo son medios para alcanzar el fin. La pregunta es ¿en qué contexto nos identificamos? ¿como propiedad o sujeto de un mundo controlado por el sindicato, o como Miembro del Universo Infinito? Esta última opción requiere que Recordemos la Unidad como nuestro Origen.
Comienzo y final son uno. Dinámicamente hablando, el comienzo, el medio y el fin es AHORA, el presente: la Unidad que podemos expresar a través de nuestra unicidad del Ser. Ahora cada uno de nosotros puede hacer La Elección.
Cuando permitimos ser controlados y explotados con los medios del sistema, podemos caer en la trampa de las creencias, de la auto-negación y de la auto-opresión, entregando nuestro poder los especialistas y líderes que deciden según qué normas y criterios deberíamos comportarnos, vivir y morir.
La Forma Sagrada de Comer puede usarse de la forma más poderosa para liberarnos de la trampa explotadora de la sociedad, sus dogmas, rituales, protocolos, sus maneras adictivas y abusivas. Puede darnos claridad y visión (viendo lo que tenemos dentro), capacitándonos a escuchar nuestro propio Corazón y Confiar en nuestra propia Mente.
El sistema ofrece el Callejón sin Salida, la Prisión. El Infinito nos da la Libertad a través de la Pureza del Ser, ofreciéndonos la mejor oportunidad de mantener la trayectoria, el Borde Afilado.
El regreso
La única limitación que se puede experimentar en el plano de la Tierra existe en el ojo y el corazón de cada Humano. La Tierra gira libremente en el cielo. Los límites se crean sólo por la fijación egoísta de intereses terrenales creados.
Hemos viajado por un Camino Largo en el espacio y el tiempo. El Gran Plan fue diseñado para que averiguáramos lo que cuesta traspasar los Límites y ser libremente Libres. La Búsqueda requiere la desviación de la Única Ley Eterna. Por consiguiente nos hemos forzado a crear nuestras propias leyes que nosotros mismos tenemos que reforzar para mantener un orden temporal. De esta forma hemos creado las fronteras, nuestra prisión. Ahora podemos descubrir y conocer la extensión más completa de nuestro Ser en el planeta Tierra. La necesidad de la prisión y los sufrimientos relacionados ya no existe. Hemos creado nuestra prisión, ahora tenemos que deshacerla!
Por haber tenido la experiencia en este plano de limitaciones, ahora podemos hacernos Grandes Sanadores de la Creación aprendiendo a convertir el veneno más mortal en la medicina más potente. Es necesaria la Purificación de cuerpo, mente y espíritu para que Regresemos al Orden de la Creación con una CONSCIENCIA más elevada.
La Gran Unión es necesaria para traer la esencia de las cuatro direcciones al Centro, el CORAZÓN ÚNICO.