Georgeos Diaz-Montexano y la Otra Tartessos dentro de mi
Siempre hay una primera vez que Ves lo que ha estado delante de ti durante toda tu vida. Siempre hay un amigo, un hijo, una lectura casual (causal) o una búsqueda inédita en la «red» que te da la clave o el tono que te hace «caerte del caballo» y preguntarte «¿a donde voy?».Georgeos Diaz cantó una canción en clave y me hice Uno con la Atlantida IberoMauretana. Fui la Otra Tartessos, Sentí en mis adentros lo que aquello significaba. Nuevos tonos y registros resonaron dentro de Mi.
Y encontré un antiguo esplendor en esta tierra Indaluza mia, y sentí los albores del tiempo en mi, sentí las eternidades sin fin en mi paisaje inmediato. Yo soy un Tartessio.
¡Ah! Georgeos, nadie es profeta en su Tierra.
Que dos alemanes vengan a decirnos como primicia lo que tu llevas años enseñándonos es la prueba más rotunda de la gilipollez y de la caradura de la intelectualidad española, en manos de unas personas que no ven más allá de sus pestañas.
¿Y qué? ¿meritos? ¿reconocimientos? ¿subvenciones? ¿sigo? a eso se transcribe la cultura actual de esta Andalucía españolizada dormida y sin conciencia. No hay conciencia, y ¿tú le pides reconocimiento, medios? Aquí no se excava porque más allá del hecho «romano» o «fenicio» no hay nada más que unos salvajes en taparrabos. Dicho sea con ironia.
A ti ya te lo hemos reconocido. Al menos yo, desde esta Atalaya. Atando cabos y midiendo sueños.
La Atlántida en Andalucía. Mi reconocimiento y mi gratitud a ti, Georgeos. Ha sabido leer lo que los siglos ocultó y mal interpretó.
¿Y qué amigo Georgeos? ¿que esperabas? Sacar a la luz lo que tu quieres sacar no es cosa de merito y fortuna.
Sacar el esplendor atlante o tartéssico (que a estas alturas de la película me da lo mismo que lo mismo me da) no es cosa de encontrarlo y saberlo.
Escúchame Georgeos, te hablo de corazón a corazón. La DIGNIDAD no se pierde por la falta de reconocimiento, se GANA desde el primer momento en que alguien, yo, te la da. Y yo soy también «mis onduras» (de ondo). Lo sabes bien, yo soy un tartessio de los pies a la cabeza, ¿a cuantos más conoces? ¿quien mejor que yo para reconocer tu esfuerzo y tu brillante teoría de la Atlantida Ibero-Mauretana? A quien sabe realmente lo que dices no hace falta reconocértelo, pero yo te lo doy. Te lo dije hace meses, lo hago por Amor.
Y
¿para qué queremos saber donde habitaban nuestros antiguos? ¿Qué herramientas utilizaban? ¿como construían?
Yo quiero conocer lo intangible.
Yo quería saber «Que anidaba en sus corazones». Esta frase la escribí en 2002, hermano.
Y lo he sabido y ¿quien sino tú me ayudaste a desanudar el nudo gordiano del hecho tartéssico?. Que a la vez me encumbró a descubrirMe a mi mismo ¿Crees que la arqueología está distanciada del descubrimiento de la conciencia?
Los antiguos sabían camuflar muy bien sus pertenencias. Eran expertos prestidigitadores. Lo tienes delante de ti y no lo ves. Utilizaban el sentido de la multidimensionalidad, cosa que se nos escapa a veces, sino todas, verdad?
Para descubrirlos debes pensar como ellos, pero ellos no pensaban, utilizaban el hemisferio derecho más que el izquierdo, eran más intuitivos y se sabían eternos y divinos. ¿Te parece poco descubrimiento?
¿Has visto el cambio que hice en mi pagina de tartessos.info desde que inicié la sección de «La Otra Tartessos»? ¿Has visto el paradigma del cambio de conciencia?
¿el cambio que hemos realizado en el horizonte del futuro cercano?
¿Tu crees que dos alemanes te van a arrebatar tu merito por robarte unas fotos y llevarlas a un foro de políticos y banqueros? Todos los días tienen su afán, paciencia hermano.
Anímate y quédate con tus paisanos, con los que te quieren. Se de tu fidelidad a tus ideales y se que no te vas a vender a la publicidad y a los flashes. Espero. Porque el entrar con el hilo de Ariadna que te lleve a la luz (el or) te lleva también a la pureza de espíritu. Solo los puros encontrarán el «oro» que no pesa, y hay mucho «oro» enterrado, mucho, hermano. Por eso sigue enterrado todavía, porque no hay muchos puros de espíritu que crean que se lo merecen.
La Amistad sigue y la Alianza se estrecha.
El hilo te lleva a tu interior, Georgeos, llevas mucho tiempo retrasándolo, no puedes escapar de ti mismo. La escalera empieza por el primer peldaño. A todos nos ha pasado.
Un abrazo y hasta pronto.
Tu hermano Soliman OrTau