ATLANTIDA. Qué es y dónde está

Para saber lo que es, nada mejor que saber quién se interesa por ella. Un interés doble, porque unos se interesan en encontrarla y otros en ocultarla. Veamos dos ejemplos, uno por cada tipo de interés. En encontrarla tenemos a los interesados en descubrir los lugares sagrados que la  Biblia cita. Su interés radica, por una parte en el episodio del Diluvio Universal, el lugar donde volvió Noé después del Diluvio. Con todas las consecuencias históricas que esto conlleva.

 

Diario de Jaén digital. Reportaje de la semana. 5/6/2011

 

El otro libro es aún más llamativo, el Apocalipsis. También el Génesis queda dentro de su interés. Pero como mi interés hoy no es otro que dar a conocer a los que la buscan, me guardaré las argumentaciones a sus motivos, para otro día. Hace dos meses la prensa española y mundial abría sus portadas con un titular de este parecido: “Un equipo de investigadores internacionales localiza la Atlántida en las marismas de Doñana” y continuaba la noticia…”el equipo está coordinado por Richard Freund, investigador y arqueólogo de la National…“ No encontraran la verdadera identidad del señor Freund, a quien declaro mis máximos respetos, por ningún lugar en toda la prensa. Richard Freund es Rabino, y conocidísimo experto, Director del Instituto de Estudios Bíblicos y Judaicos en una conocida Universidad de EEUU. La pregunta  resulta descaradamente ser una respuesta en sí misma. ¿Por qué se esconde su auténtica especialidad profesional?  ¿Quién la esconde?

Portulano, Mallorca 1508. Los ríos señalan los límites de la antigua Atlántida.

Recuerdan su navegabilidad y el lugar donde está el Promontorio Sacro. (Foto Mario Morcillo).

 


Vayamos ahora a quienes prefieren esconderla, ocultarla detrás de nuevas ubicaciones cada día y artimañas de corte parecido. Un tal  Pedro Fernández de Hijar,  hijo ilegítimo de San Jaime I el Conquistador, pretendido descendiente de la dinastía merovingia, por tanto de Noé a través de Gerión, Rey de Tartessos, dueño de los toros rojos robados por Hércules. Este señor forma parte de los nobles que fueron expulsados por el otro Santo en la batalla, San Luis Rey de Francia, que la ganó con dureza y exterminó a los CATAROS, ALBIGENSES, LIGURES Y AFICIONADOS A LOS TOROS. Su actual descendencia está en la Casa de Alba, quien ostenta el Título de Duquesa de Hijar. Uno más entre tantos, que provienen mayoritariamente de aquella partida de Templarios que tuvieron que abandonar las tierras QUE DEJARON DE SER del Reino de Aragón definitivamente.   El toro rojo es el animal sagrado por excelencia para estos Monjes-Guerreros, pues el toro les acompaña allí donde van ellos. Con sus escudos hacen ostentación de ser quienes son, sacerdotes que pueden sacrificar toros. Lo que no podía hacer cualquiera bajo pena de muerte. Desposeídos de bienes y castillos por San Luis, abandonan las tierras del sur de Francia y vuelven a las tierras de sus antepasados, curiosamente las mismas tierras que diez mil años atrás ocuparon los antiguos LIGURES, CATEROS, ALBICENOS, todos con el toro rojo. Pero el paradigma de esta historia de toros es otro de los antepasados de la Casa de Alba: .D. Pedro Atares, abuelo del que luego fuera Papa Calixto III, el primer Papa Borgia que desafió a todo el orbe cristiano celebrando corridas de toros en el mismísimo Vaticano. Ante tanta evidencia y creyendo estar totalmente equivocado, me veo en la obligación de comprobar esas coincidencias entre los que se van de la Atlántida hace 10.000 años y los que vienen a Murcia y Segura, hace 800 años. Todo este ajetreo de toros en los caminos y escudos me llega a preocupar, pues el toro colorado se convierte en una especie de símbolo sagrado. El sacrificio del toro a Poseidón, el dueño del tridente (Flor de Lis, el primer hierro conocido de la casta Jijona) está detrás de todo este andar entre papeles viejos casi ilegibles. Pues bien, los descendientes de aquellos templarios mantienen un vínculo real y efectivo con el título que ostentan. De no ser así, lo perderían. Pues aquí tenemos a algunos de los que no quieren que la Atlántida salga por ninguna parte.

 

 


Las razones de unos y otros son muy parecidas, pues para ambos es un lugar que esconde lo más antiguo de la humanidad, donde los escritos más antiguos colocan los sitios más maravillosos en los que el ser humano vivió antes de ser atacado por la serpiente con la dichosa manzana. Es el lugar donde se inicia, POR PRIMERA VEZ UNA RELIGION MONOTEISTA. Que habría de ser el origen de las tres religiones monoteístas actuales, esas que siempre están al estilo aquí te pillo. Ya voy comprendiendo el interés de unos y otros. Aquellos la buscan porque no saben dónde está, y todavía esperan a su Salvador. Y los otros la esconden porque ¿Por qué? Lo sabremos a su debido tiempo.

 

 


Desde el punto de vista geográfico hay que distinguir entre la Ciudad principal, que no tiene por qué ser solo una. Y la Isla Perdida, el Continente Perdido. De nuestros trabajos, y una vez que hemos comprobado que el toro rojo estaba en Segura, estuvo en Segura y está en Segura, nos atrevemos a proponer la tesis que ha quedado ya solucionada, bajo las siguientes respuestas a las cuestiones del Congreso de Milos, que quedan ya obsoletas y demostradamente erróneas en algún caso. Los problemas de espacio nos impedirán incluirlas todas, pero la Propuesta cumple todas las condiciones e, incluso, las matiza, corrige y renueva.

1. El reino o ciudad principal de la Atlántida debe haber estado localizada donde había una isla y donde partes de ella pueden aún existir.

 

 

MIRA COMO TETIS, NAVEGABLE, CONFUNDE A LOS PUEBLOS:
UNIDO ESTA LO QUE ANTES LA URBE Y EL ORBE FUERAN

 

 

Séneca. Epigramas.
A buen entendedor, pocas palabras bastan. Solo un genio podía definir en dos frases tan rotundas, tan cargadas de contenido, el lugar donde estaba la Atlántida y el lugar donde estuvo escondida  desde que desapareció. Los pueblos no encuentran la ISLA Atlántida, ESTAN CONFUNDIDOS, y surge la teoría del hundimiento total bajo el mar. No fue así y, como lo corrobora Séneca, lo que ocurrió es que la isla Atlántida desapareció…pero porque dejó de ser una isla. Aún añade más confusión el hecho de que la ciudad sí que fue arrasada por el agua.

UNA PRUEBA MÁS

¿Jaén puerto de mar? Pues sí. El más antiguo puerto de la historia. El mar de Tetis llegaba hasta las mismas puertas de la ciudad. Lo que hoy se puede apreciar como una estructura enorme de círculos concéntricos, es en realidad una enorme almadraba. Una construcción dedicada a dejar pasar las aguas del mar, no dejando escapar a los atunes que con ella venían. No podía ser sino un profundo conocedor de las costumbres marinas, aficionado a la Historia de su tierra y conocedor de lo más profundo de nuestros secretos, el que descubriera esta realidad. El Dr. Mario Morcillo Moreno, Veterinario Especialista en Animales Marinos, con especial dedicación a las orcas y a los atunes. Mucho, muchísimo, nos queda de aprender de Mario, a quien he propuesto entrar en el equipo que profundizará en la Historia premeditadamente Olvidada de Segura de la Sierra.

 

 


2. El reino o ciudad principal de la Atlántida debe haber tenido una geomorfología bastante distinta integrada por anillos concéntricos de tierra y agua alternados.
Ya sabemos lo que eran los anillos. Los dichosos anillos repartidos por todo el mundo. Almadrabas para la captura de atunes. Ahora entendemos, gracias a Mario Morcillo, de Torres de Albanchez, porque aparecían tantas ubicaciones repartidas por el mundo.

 

 


3. La Atlántida debe haber estado situada fuera de los Pilares de Hércules, o más allá de los pilares.
Calpe Hercúlea, en la costa valenciana, es decir GIBRALTAR HERCULEO, es uno de los pilares de  Hércules, el otro pilar lo suponemos en Torrevieja, en esta entrada la ciudad queda “más allá de los pilares”

 

 


9. El reino o ciudad principal de la Atlántida debió haberse hundido enteramente, o en parte, debajo del agua.
La ciudad fue arrasada por las aguas del Lago Ligústico. La otra Atlántida, la gran isla, ya lo hemos dicho anteriormente: sencillamente dejó de ser una isla.

 

 


13. En la Atlántida se practicó el sacrificio de toros.
No creo que en este periódico se necesite demostrar la existencia de rituales sagrados de sacrificios de toros. Pero por si algún escéptico no está convencido, diré que el Toro de San Marcos está citado en 1598 como un recuerdo de lo que anteriormente era el Rito de Osiris. El Evangelista San Marcos fue torturado en Alejandría tratándole como si de la doma de un toro fuera. Atado con una soga, arrastrado por las calles y previamente encerrado en una habitación con la soga al cuello. Justamente lo que se hacía para que los toros humillaran y fueran menos reticentes a la doma, para convertirlos en bueyes de provecho.

14. La destrucción de la Atlántida fue acompañada por un terremoto.

Cierto. Estamos justo encima de una falla.

 

 

15. Después de la destrucción de la Atlántida, el paso de naves fue bloqueado.
Ciertamente en los últimos miles de años ya no cruzaban las aguas de Tetis hasta el Océano. La navegabilidad será posible gracias a las aguas de lluvia concentradas en el Lago Ligustino que se repartían hacia las dos cuencas, partiendo de las dos bocas del Rio Tartesos. Pero todo cambió cuando “los montes se hundieron” y dejaron caer el soporte del lago, sus paredes. Sin lago, y con un monte recién nacido cortando el paso, las aguas comenzaron a ser Tartessos las del occidente y Tader las del oriente

 

 

16. Los elefantes estaban presentes en la Atlántida.
Los elefantes eran fauna africana y la isla Atlántida estuvo unida, antes de ser isla,  a África por la cadena de Gibraltar. Y muy probablemente se extinguieran una vez se abrió el estrecho.
De cualquier manera los elefantes estuvieron en esta zona con Aníbal. ¿Cómo cruzaron a España? Tendremos que suponer que uno a uno. O tendremos que creer que alguno quedaba por aquí.

 

 

18. Fuentes calientes y frías, con depósitos minerales, estaban presentes en la Atlántida.
¿Quién no conoce las aguas calientes de Reolid? Estamos sobre una falla y eso es definitivo para saber el origen de las calientes. Las frías espero no tener que explicarlo a los de Milo. Otra vez gracias a Mario.

 

 

19. La Atlántida se extendía en un llano costero 2000 x 3000 estadios, rodeado por montañas que llegaban hasta el mar.
Interesantísima proposición. Esto quiere decir que no estaba en la costa sur de la península actual, pues no aparecen las dichas montañas que habían de estar entre la ciudad y la costa.  Ahora bien, si situamos la ciudad principal en la costa norte del macizo bético-rifeño, como hacemos en nuestra propuesta, las montañas nos aparecen como la cordillera bética. Lo que dicen los escritos de Platón es que el continente tenía 3.000 estadios a lo largo y 2.000 a lo alto. Un estadio eran 180 metros y si medimos las distancias desde Ayamonte a Calpe, por un lado, y desde Gibraltar hasta el final de la cordillera bética, tendremos justamente esas distancias, modificadas mínimamente por el tiempo. La superficie de la isla era delimitada por la actual costa andaluza desde Huelva hasta Torrevieja  y seguía  recorriendo la falla principal de la antigua unión entre el Macizo Bético-Rifeño  y la meseta peninsular. Esta respuesta está claramente condicionada por la primera. De manera que la damos por satisfecha.

 

 

20. La Atlántida controló a otros estados del período.
Los enfrentamientos de ligures, con los pueblos de alrededor están científicamente probados.

 

 

24. Cada 5to y 6to año, sacrificaban toros.
Los sacrificios eran habituales y persistieron hasta la edad media. Véase el bucráneo de Segura. La ciudad Erithia junto al lago, “alimentadora de bueyes”. El Toro de San Marcos. Las pinturas rupestres de Zumeta. Esta cuestión es tan evidente que no necesita de justificación alguna.

Añadiendo un detalle importante no aparecido en prensa, debemos comprobar, como la escritura prehispánica tiene menor presencia en la actual costa sur peninsular, que en las propuestas costas de las cuencas de Segura y Guadalquivir. Siendo de especial importancia la siguiente comprobación que se propone a quienes verificar por sí mismos esta teoría: busquemos restos prehispánicos en la zona de la actual desembocadura del Rio Segura, Observemos que esos restos son de origen griego, en parte. Hagamos la misma búsqueda en el delta del Guadalquivir, ojo, en el delta, no más arriba del delta. Y encontraremos que los restos griegos prehispánicos son escasos. Bajo esta evidencia, debemos sostener que la entrada de los griegos hacia la ciudad principal se hizo por el Rio Segura hacia adentro hasta pasar cerca de Promontorio Sacro (área de Segura de la Sierra). Y la salida por esta misma vía nos lleva al primer rio que encuentran los escritos…el Ibero…el Ebro.

 

 


La falta de espacio nos ha obligado a no incluir algunas de las respuestas, y aunque han quedado reflejadas las más importantes, no son los resultados de la investigación ni tampoco el desarrollo de la misma, es solo la aplicación de aquellas cuestiones, al lugar que los resultados me proponen. Termino con mi respeto, admiración y recuerdo hacia todos los buscadores del mito, que lo fueron y lo son, y un “lo siento” para todos aquellos que viven el mito de manera apasionada, haciéndoles saber que queda ahora más trabajo por hacer de lo que quedaba antes de aparecer. Porque el mito de la Atlántida lo será siempre. La Atlántida es ahora una realidad. Sin embargo, después de cinco mil años, es comprensible que nadie lo crea. Excepto en el caso de que exista la más remota posibilidad, porque entonces ningún lugar de la Tierra desaprovecharía la oportunidad de comprobarlo.

 

 


Antonio Morales Arias